Pensamos que sería divertido recorrer las calles de Girona ofreciendo de forma ambulante los postres de El Celler de Can Roca en el carro de los petit fours. La idea era motivadora y brillante, pero nos encontramos con limitaciones en la normativa municipal, de manera que optamos por aparcar el carro de los petit fours en un céntrico local de la ciudad de Girona. Nuestra pasión por los helados hizo aventurarnos en este mundo y así es como nació Rocambolesc. ¿Y por qué Rocambolesc? Su significado es extraordinario e inverosímil, además encontramos “Roca" dentro de la palabra, nos encantó y así es como escogimos este nombre para nuestras heladerías. Queríamos que Rocambolesc evocara un mundo de fantasía tanto para los niños como para los adultos, por esta razón queremos que cuando nuestros clientes entren en cualquiera de nuestras heladerías se puedan sentir en otro mundo. En el proceso de elaboración y creación inicial de los helados, existía una divertida sinergia entre los postres de Jordi Roca y los helados. Los toppings se convirtieron en la alternativa perfecta para que los helados devinieran la versión completa del postre. Con el paso de los años, nuestros helados han ido creando su propia personalidad e identidad, no sólo se inspiran en los postres de Jordi Roca, sino que un viaje, un aroma, un producto, un recuerdo… puede convertirse en un helado. Compartir nuestra pasión por los helados es un sueño hecho realidad para nosotros, una manera muy agradable de vivir el mundo dulce. Traer dulzura y magia al mundo es una misión de vida maravillosa. Descubre las aventuras más Rocambolescas en nuestros vídeos…